Símbolos de un verano.

22/7/12
Vuelvo tras una gran sequía de prosa y verso. No se equivoquen, no es falta de inspiración, es falta de tiempo que dedicarle al blog.


Levantarte. Permitirte el lujo de elaborar tu desayuno. Leer las noticias del día con un zumo de naranja recién exprimido, el perfecto café manchado y tostadas. Dedicarle al gran amor de tu vida, la música, un par de horitas. Buscar recetas para probar una nueva comida. Una siesta con el soporífero Tour de fondo. Un tiempo para hablar con amigos y para ese videojuego que te absorbe. Un tapeo con la familia. Un ensayo del grupo. Un momento con música de fondo para leer esos libros que no has podido durante todo el año. Un rato de ejercicio. Una relajante ducha. Unas cervezas con los amigos. Un día de playa, jugando al fútbol americano, un rondo, a las palas, bañarte, tomar el sol, todo en la mejor compañía. Una chica preciosa a tu lado, una musa que te sorprende. Una segunda casa, en la playa, con cócteles y música. Una foto, un símbolo para el verano. Las estrellas por la noche en la playa. Conducir con las ventanillas bajadas, las gafas de sol y tu música favorita. Conversaciones largas y placenteras en un coche, al alba. Besos. Un viaje absurdo, de locura. Acústicos en la playa. Amigos increíbles. Películas y series para simplemente, tumbarte. Tiempo para, si quieres, no hacer absolutamente nada. Manifestaciones. Y muchas más cosas que me dejo por escribir. Y muchas cosas por hacer en el tintero. Al fin y al cabo... Sólo van 3 semanas de verano. Pero... ¿Qué más podría pedir?

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